5 errores comunes en la declaración de la renta y cómo evitarlos
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Los errores en la declaración renta pueden salirnos caros si no prestamos la debida atención. Aunque Hacienda ofrece borradores y datos automáticos, la responsabilidad sigue siendo nuestra. En esta guía fiscal de impuestos para nómadas digitales, también abordamos temas como el seguro para nómadas digitales: opciones y beneficios, la Ley Beckham y cómo tributan los nómadas digitales en España. Hoy nos enfocamos en ayudarte a no cometer errores que puedan derivar en sanciones.
¿Qué pasa si hago mal la declaración de la renta?
Cometer errores en la declaración de la renta puede tener consecuencias económicas importantes. Desde pagar de más hasta recibir sanciones por parte de la Agencia Tributaria. Incluso un pequeño olvido puede alterar el resultado de tu liquidación.
En algunos casos, Hacienda actúa de oficio y corrige los errores. Pero no siempre es así. Si detectan que hubo omisión de ingresos o deducciones indebidas, pueden aplicar recargos e intereses. Por eso es fundamental revisar cada dato con precisión antes de presentarlo.
Me han hecho mal la declaración en Hacienda, ¿qué debo hacer?
Cuando la declaración ha sido presentada con errores por un tercero o incluso desde Renta Web, es posible rectificar. Lo primero es identificar el error y valorar si te perjudica o si perjudica a Hacienda.
Si el error es a tu favor, puedes solicitar una rectificación. Si es en contra de Hacienda, deberás presentar una declaración complementaria. En ambos casos, es clave actuar dentro del plazo de prescripción y contar con justificantes.
5 errores comunes en la declaración de la renta que debes evitar
Vamos a repasar los errores de declaración de la renta más frecuentes que observamos cada campaña fiscal. Son situaciones comunes, pero que pueden marcar la diferencia entre pagar de más o recibir una devolución correcta.
1. Confirmar el borrador sin revisar
Uno de los errores más habituales es aceptar el borrador sin comprobar la información. Hacienda incorpora datos automáticos, pero no siempre están actualizados ni completos.
Es esencial revisar:
- El estado civil actualizado, especialmente si ha cambiado recientemente por matrimonio o divorcio.
- La inclusión correcta de hijos, descendientes u otras personas a cargo durante el ejercicio fiscal.
- Cambios de domicilio, compra de vivienda o mudanza entre comunidades autónomas.
- Situaciones especiales como familia numerosa o discapacidad reconocida.
- Cualquier deducción fiscal autonómica o estatal a la que tengas derecho y que no aparezca premarcada.
2. No declarar todos los ingresos percibidos
Otro error común ocurre cuando hay varios pagadores y no se incluyen todos los ingresos en la declaración. Si hemos cambiado de trabajo o tenido empleos temporales, esto es muy frecuente.
Hacienda detecta estas situaciones al cruzar datos. Para evitar problemas:
- Consulta tus certificados de retenciones de todas las empresas en las que hayas trabajado.
- Verifica que todas las nóminas estén reflejadas correctamente, incluyendo finiquitos o atrasos.
- Declara todo ingreso, incluso si no aparece en el borrador o si lo consideras “pequeño”.
- Revisa ingresos por trabajos puntuales, colaboraciones o rentas por actividades económicas esporádicas.
3. No aplicar deducciones fiscales a las que tienes derecho
Cada año muchos contribuyentes pierden dinero por no aplicar deducciones fiscales. Algunas son conocidas, pero otras pasan desapercibidas.
Ejemplos:
- Deducción por alquiler de vivienda habitual, según tu comunidad autónoma.
- Por maternidad o paternidad, incluyendo cobros pendientes o nacimientos recientes.
- Por donativos a ONGs, fundaciones o instituciones reconocidas.
- Gastos de formación, cursos homologados y colegiación profesional obligatoria.
- Gastos deducibles como autónomos, como suministros, cuota de Seguridad Social y herramientas digitales.
- Retribuciones en especie y desplazamientos pagados por la empresa, si están bien documentados.
4. No declarar ingresos procedentes del extranjero
Si hemos percibido rentas fuera de España, debemos declararlas. Aunque hayan tributado en su país de origen, es obligatorio incluirlas en el IRPF.
Para evitar doble imposición:
- Consulta si existe convenio con el país de origen de los ingresos percibidos.
- Declara el ingreso en el apartado específico para rendimientos del extranjero.
- Aplica la deducción por doble imposición internacional, si corresponde.
- Guarda toda la documentación acreditativa: contratos, facturas, certificados de retención, etc.
- Considera asesoría profesional si trabajas en remoto para clientes fuera de España.
5. No actualizar el domicilio fiscal
Parece un detalle menor, pero el domicilio fiscal determina notificaciones, competencias autonómicas y deducciones aplicables.
Si cambiamos de comunidad autónoma:
- Debemos informar a Hacienda mediante el modelo correspondiente o al presentar la declaración.
- Puede variar el tipo impositivo según tu nueva residencia.
- Afecta a deducciones autonómicas, becas o bonificaciones específicas.
- Si el domicilio es incorrecto, podrías no recibir notificaciones oficiales en plazo.
- La desactualización puede causar errores al aplicar el mínimo personal o familiar autonómico.
Sanciones por errores en la declaración de la renta
Las sanciones por errores en la declaración de la renta pueden ser leves, graves o muy graves. Todo dependerá de si ha existido ocultación de información o dolo por parte del contribuyente.
Hacienda puede imponer:
- Intereses de demora por presentar fuera de plazo.
- Recargos por ingresos indebidos o rectificaciones voluntarias.
- Sanciones que oscilan entre el 50% y el 150% de la cantidad dejada de ingresar.
- Multas fijas por incumplimientos formales (no presentar en plazo, errores en datos personales, etc.).
Para evitarlo, lo mejor es revisar bien antes de presentar o contar con asesoramiento profesional.
¿Puedo rectificar una declaración de la renta ya presentada?
Sí. Si el error te perjudica, puedes solicitar una rectificación de autoliquidación dentro del plazo legal. El límite es de cuatro años desde la fecha de finalización del plazo de presentación.
Esta opción aplica cuando:
- No aplicaste una deducción o beneficio fiscal al que tenías derecho.
- Incluiste ingresos erróneos, repetidos o que no correspondían.
- Pagaste más de lo que correspondía por un cálculo incorrecto.
- Se ha producido un error material, aritmético o de hecho en la liquidación.
¿Cuándo debo presentar una declaración complementaria?
Debes presentarla si el error ha beneficiado al contribuyente injustamente. Es decir, cuando Hacienda ha recibido menos de lo que debería.
Ejemplos:
- Omisión de ingresos por rendimientos del trabajo, alquileres o inversiones.
- Ganancias patrimoniales no declaradas tras una venta de inmueble o acciones.
- Aplicación indebida de deducciones o beneficios fiscales no justificados.
- Inclusión de datos falsos o manipulados para reducir la cuota a pagar.
En este caso, se genera una nueva autoliquidación y, si procede, se paga la diferencia con los intereses correspondientes.
TeGestionamos puede ayudarte
En TeGestionamos contamos con un equipo experto en declaraciones de la renta. Ayudamos a evitar errores comunes y a rectificar cualquier incidencia que ya se haya producido.
Preguntas frecuentes
Evitar los errores en la declaración de la renta está en nuestras manos. Desde revisar el borrador hasta contar con asesoramiento experto, cada acción marca la diferencia. En TeGestionamos estamos para ayudarte a presentar tu renta con seguridad, precisión y el mayor beneficio posible para ti.
¿Qué ocurre si cometo un error y no lo rectifico?
Hacienda puede detectarlo en comprobaciones posteriores. En ese caso, emitirá una liquidación paralela que incluye intereses de demora y posibles sanciones. Cuanto más tardes en corregirlo, mayor será el coste. Por eso recomendamos actuar de inmediato, especialmente si se trata de ingresos omitidos.
¿Cuánto tiempo tengo para rectificar una declaración?
Dispones de cuatro años desde el día siguiente al fin del plazo de presentación. Este es el periodo de prescripción general.
Durante ese plazo puedes:
- Presentar una solicitud de rectificación para corregir errores a tu favor.
- Aportar documentación que justifique deducciones no aplicadas o gastos mal calculados.
- Reclamar una devolución indebida o excesiva que haya sido ingresada en Hacienda.
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